Retroceso de la Religión Católica en México
En México la religión católica rige el ámbito de las creencias de las personas, no obstante en las últimas décadas ha venido perdiendo su posición como religión absoluta. Los datos provenientes de los censos que se realizan en México cada diez años establecen que en 1950 los individuos que se declararon católicos eran el 98.2% de la población total en el país. Para 2010, fecha del censo más reciente, este porcentaje bajó a 89.3%.
Ver cuadro.
Del cuadro anterior es posible identificar que el retroceso de la religión católica en México comienza a observarse en 1980, a partir de esta fecha hay una disminución casi constante de 2 puntos en el porcentaje de católicos, finalmente en la última información censal disponible se pierdan casi 3 puntos en el indicador. Para el periodo 1980-2000 el porcentaje de población que no profesa religión se mantiene constante entorno al 3%, no obstante el porcentaje de "No católicos" se mueve del 4.4% a 8%, sugiriendo así, que durante estas décadas son otras religiones las que comienzan a crecer dentro del esquema de la fe en México. Ahora bien, para 2010 el indicador de "No Católicos" vuelve a crecer para situarse en 10.7%, pero con la particularidad que en esta ocasión el segmento "Sin Religión" tiene su primer alza importante en 30 años, pasa de 3.5% a 4.9%, es decir en este último periodo continúan avanzando otras religiones, pero también el desconcierto hacia los credos vigentes.
México es diverso en lo económico como en lo social, y la religión no es excepción. A nivel del porcentaje de católicos declarados en el Censo del 2010, podemos identificar probablemente 6 grupos de estados, sólo destacaré 2 de ellos.
1. Aquellos estados sureños de importante población indígena: Chiapas, Campeche, Quintana Roo y Tabasco. Valores entorno al 65% del indicador. Los más bajos.
2. Un otro grupo del centro-bajío donde la presencia católica es entorno al 93%: Guanajuato, Aguascalientes, Jalisco y Zacatecas, este con tendencia a ser más parecido en estilo de vida al norte del país, pero con los valores más altos del indicador.
La Ciudad de México, el área de mayor concentración urbana del territorio mexicano, y sin duda la más abiertamente diversa, tiene un 84.4% de católicos en su población. La noción es que en la medida que nos alejamos del centro del país, ya sea al norte o al sur, la porción de población católica identificada por Estado disminuye.
Las causas de la contracción de la fe católica de los últimos años en México puede asociarse a la promoción mediática de otros credos - los ejercicios de promoción de milagros en tv abierta por las iglesias de origen brasileño son un ejemplo -, así como a los distintos escándalos nacionales e internacionales de agentes asociados al catolicismo. Sin olvidar el aburguesamiento de sus representantes: simplemente con una imagen ajena a la austeridad y a la construcción de caminos de apoyo a los más necesitados.